El Castillo Fortaleza que defendió Zamora
Siglo XI
El Castillo fortaleza de Zamora es un complejo fortificado situado en el extremo suroccidental de la peña fuerte de la ciudad de Zamora. Es el resultado de diferentes intervenciones de cariz defensivo que van desde la época medieval hasta la primera guerra carlista. Aunque sus excavaciones han proporcionado vestigios arqueológicos de la época preromana y altomedieval, el castillo fortaleza desempeñó funciones militares durante la guerra de sucesión castellana acaecida entre los años 1475 y 1479, a la muerte del rey Enrique IV de Castilla.
Maltratado y olvidado por sus alcaides, los condes de Alba, el castillo fortaleza volvió a tener un papel muy destacado a raíz de la separación entre las coronas de Portugal y España, iniciada en el año 1640, durante el reinado de Felipe IV. Remodelado durante la guerra de sucesión española con Felipe V y nuevamente adobado con la francesada a inicios del siglo XIX, todavía conserva el foso perimetral, la barbacana externa, el patio de armas, la torre del homenaje de planta romboidal y la llamada puerta de Santa Colomba. Tras perder su marcialidad y su utilidad poliorcética, funcionaron en sus dependencias una cárcel de audiencia y prisión correccional, y una escuela de artes aplicadas. Más recientemente ha sido acondicionado como anexo del museo dedicado a la obra del escultor zamorano Baltasar Lobo.
Anexo al castillo, y situado alrededor del primitivo alcázar, se encuentra el Parque del Castillo desde cuyos miradores se disfruta de unas extraordinarias vistas sobre el río Duero.
Dado lo vetusto de sus glorias militares, era de esperar que Zamora ostentase un recinto amurallado de primer orden, y, sin embargo, nada de él sorprende, ni por grandeza, ni por antigüedad, envuelto lo más de ello en esa indecisión de formas que suele resistir a toda cronología en nuestros edificios civiles en la Edad Media (Manuel Gómez Moreno, Catálogo Monumental de España. Provincia de Zamora (1903 – 1905), 1927)