Sendero GR 14 en Zamora
El Sendero GR 14 en Zamora cruza la provincia de este a oeste, siguiendo el cauce del río Duero. El itinerario ofrece una multitud de placeres que, sin duda, sorprenderán gratamente al senderista o al btt’ero que se anime a realizarlo […] Te contamos 9 razones para recorrer el Sendero GR 14 en Zamora que te animarán a realizar la Senda del Duero en esta provincia.
El Sendero GR 14 en Zamora: De la Tierra del Vino a la Tierra del Pan
1. Degustar un vino de Toro mientras contemplamos su Colegiata
De los numerosos tesoros que alberga la localidad de Toro, dos reclaman especialmente nuestra atención: La Colegiata de Santa María la Mayor y el prestigioso vino Denominación de Origen Toro cuya merecida fama se extiende por el mundo.
Nuestra recomendación: Acompaña el vino con una calandraca, una tapa típca toresana que puedes degustar en cualquiera de los muchos bares y restaurantes de la ciudad.
2. Pasar por el Culo del Mundo
Curioso y descriptivo nombre para el paraje por donde el Sendero GR 14 desciende bruscamente hasta la llanura que formó el río Duero al encajarse la red fluvial durante el cuaternario.
Desde este punto disfrutarás de unas extraordinarias vistas sobre el entorno, y siempre podrás presumir de haber ido hasta el culo del mundo.
El Sendero GR 14 en Zamora: La llanura cerealista
3. Visitar una ciudad medieval
Zamora, cuyo casco antiguo está bastante bien conservado, te sorprenderá por su cálida acogida.
Para descubrir Zamora a fondo consulta nuestra Guía Turística de la Ciudad de Zamora. Y no olvides ir de tapas por los muchos bares de la ciudad. No te arrepentirás.
4. Averiguar dónde y por qué el barro se hace cacharro
¿Quién no ha visto en cualquier feria de artesanía que se precie las afamadas piezas de alfarería de Pereruela?
Pereruela, importante punto de paso en la ruta hacia Miranda do Douro, es la puerta de entrada a la Comarca de Sayago. No olvides, cuando viajes por esta zona, degustar la comida zamorana cocinada en los cacharros de Pereruela.
El Sendero GR 14 en Zamora: La Comarca de Sayago y los Arribes
5. Explorar la historia
Muchos son las huellas que el paso del tiempo ha dejado en estas tierras: Calzadas y puentes romanos, vestigios de nuestros antepasados vetones, y ¡hasta un antiguo yacimiento de oro explotado por los romanos!
Sentirás la emoción de caminar sobre tierra milenaria, repleta de antiguas leyendas.
6. Escuchar el agua correr por las riveras
La comarca de Sayago se enclava sobre un basamento de granito impermeable que da lugar a una singular red fluvial. En los paisajes de Sayago aparecen multitud de riveras cruzadas por rústicos puentes construidos con lajas de piedra.
Nuestro consejo: Déjate seducir por el sonido del agua saltando entre piedras. Pocos paisajes habrá en la Península Ibérica tan pastoriles como una rivera con su prado y su puente de piedra.
7. Sentir la grandeza de un espacio agropecuario único en el mundo
PEn Sayago el granito se halla tan próximo a la superficie que los suelos presentan escasas condiciones agrícolas. Sus habitantes se enfrentaron a duras condiciones para cultivar la tierra, forjando un fuerte sentido de la propiedad. Ante el viajero el espacio agrario aparece fragmentado en multitud de parcelas cercadas de piedra creando un entorno agropecuario único en el mundo.
8. Llenarse de Arribes
Los Arribes del Duero forman parte de la comarca que se conoce tradicionalmente como La Raya por su situación limítrofe con Portugal. Todo el espacio está condicionado por el profundo encajonamiento del Río Duero y sus afluentes; y fue declarado Parque Natural, en el año 2002, para preservar los valores naturales, paisajísticos y faunísticos que atesora.
Ante este espacio tan agreste y singular, solo podemos recomendarte: ¡Tienes que verlo!, y ¡sentirlo!
9. Disfrutar del vino y del aceite de los Arribes
El microclima de los Arribes permite el cultivo de la vid y de árboles de clima suave como el olivo y el almendro. Durante siglos los habitantes de estas tierras transformaron los adustos cuestos de los Arribes en bancales para ganar suelo fértil y llevar a cabo los cultivos.
Los Arribes son un ejemplo de economía sostenible. Los productos elaborados en esta tierra tienen sabor a lo auténtico, a lo puro y perdurable. Nuestro consejo: Además del excelente vino y del magnífico aceite de oliva, no dejes de degustar otros productos típicos de la zona como el queso de cabra, las mermeladas y los dulces, todos ellos elaborados con el sello del gusto por lo bien hecho.
Accede a toda la información sobre el Sendero GR 14, visitando nuestra página Sendero GR 14
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También digna de mención: La amabilidad y grandeza de sus gentes…..
Y, además, es una razón muy poderosa 😉